Las
técnicas de construcción de las viviendas rurales de la provincia de Catamarca
se caracterizan en general por presentar una estructura básica. El modelo
arquitectónico de las viviendas respeta un patrón cultural en cuanto al tipo de
estructuras, los materiales y los métodos con los que son construidas. La caracterización en forma general y repetida
incluye a la enramada, al alero, el horno de barro, al granero, al árbol de las
gallinas, la reserva de leña, el huerto de tunas, el corral, el chiquero o
corral y las dependencias necesarias erigidas alrededor del patio.
La
construcción del rancho responde a una adecuada relación con factores climáticos
de la región: gruesos muros, techumbre espesa, piso absorbente, media penumbra
interior y estructura resistente de madera independiente de los cerramientos
laterales.
La
escasez de lluvias y las fuertes diferencias térmicas de la provincia hacen del
adobe el mejor recurso, material accesible, barato y moldeable, utilizando una
técnica constructiva ancestral que no requiere de herramientas especiales.
En
términos de mejoramiento de la vivienda rural, algunos investigadores proponen
el uso de cemento en unión a la tierra cruda (en proporción 1 de cemento por 10
de tierra) a fin de dar mayor solidez al muro.
Cualquier
proyecto de mejoramiento de viviendas rancho deberá tener en cuenta los
siguientes aspectos:
- Características climáticas y geográficas
- Patrones culturales
- División sexual del trabajo
- Actividades predominantes de agricultura o ganadería domestica para supervivencia
Se
considera al peridomicilio del rancho como el sitio clave de la infestación por
los insectos vectores del intradomicilio ya que desde las estructuras y
dependencias que rodean al rancho, se produce la infestación del mismo. Sin
embargo, “en pocos sitios se sabe con exactitud qué significa el peridomicilio
para el poblador, y cómo jerarquiza en el mismo el uso del espacio y la inversión
en sanidad animal.
Este
problema notorio de infestación intradomiciliaria desde el peridomicilio se
fundamenta en múltiples factores, entre ellos los factores sociales, económicos
y las estrategias de supervivencia.
En
general el rancho está asociado a la no propiedad, a la no pertenencia, a la
escasez. Varios antropólogos afirman que esa característica de no pertenencia
de la tierra en donde se ubica el rancho, hace lo poco que poseen para
sobrevivir sea sobrevalorado, por lo que protegen sus posesiones al extremo.
Esta concepción lleva a los habitantes del rancho a ubicar los corrales,
gallineros y chiqueros muy próximos a las estructuras que son ocupadas por
ellos para evitar que las aves y ganado de corral sean víctimas de los
depredadores naturales (comadrejas, zorros, pumas). Esta práctica de protección
sobre sus posesiones, eleva el riesgo de infestación y colonización
intradomiciliaria ya que este es invadido por los insectos vectores (Vinchucas)
desde el peridomicilio.
Datos
importantes aportados por el Censo 2010 indican una situación de desigualdad.
La cantidad de hogares constituidos supera ampliamente a la de viviendas
disponibles. Las cifras señalan que en la provincia hay 89.376 viviendas habitables, mientras que se censaron 96.001 hogares, en los que se distribuyen
362.534 habitantes.
El
déficit habitacional que se sospechaba que existe ahora tiene una cifra: hay
6.625 familias que aguardan la posibilidad de contar con su casa propia. En el
mismo aspecto, el Censo 2010 también registró la cantidad de hogares que viven
en ranchos, casillas, piezas o construcciones no aptas para habitar pero que
sin embargo son utilizadas como refugio para las familias.
En
el total provincial, se especifica que 89.655 hogares habitan en casas, 2.250 en ranchos, 422 en casillas, 2.909
en departamentos de conglomerados de edificios y 105 familias se alojan en
locales no aptos ni construidos para habitar.
En
este mismo total provincial, se puede destacar que en la Capital catamarqueña,
hay 247 hogares que contienen aproximadamente a 807 personas, que aún viven en ranchos y viviendas sumamente precarias. Se
indica también que 10.675 es el
número de construcciones con techo de caña, tabla, paja con barro, o paja sin
cielorraso existentes en la provincia de Catamarca.
Resumiendo…
- La provincia de Catamarca tiene un total de 89.376 viviendas, de las cuales, 2.134 son ranchos representando ello un 2,38% sobre el total de viviendas de la provincia.
- La población total de la provincia asciende a 362.534 habitantes. 7848 habitan viviendas ranchos, es decir que el 2,16% de la población total de la provincia, ocupa este tipo de viviendas.
(Fuente: Voces
Escritas. Periódico Digital Catamarca)